jueves, 18 de noviembre de 2010

Cuento de Noviembre-Fábula


-Tengo que estudiar mucho para los exámenes en un día y me angustio, ¿podría usted darme un consejo? -Dijo Andrea.
-Querida Andrea, le daré un consejo con esta historia -Dijo el delegado-Había una vez dos chicos a los que les pusieron un examen para después de dos semanas. El primer niño estudiaba un poco cada día lo que habían dado y no tenía que utilizar mucho tiempo, con lo cual le daba ocasión a hacer más cosas.
Sin embargo el segundo niño no estudiaba nada durante las semanas hasta que llegó el día antes del examen, que tuvo que utilizar toda la tarde para estudiar y no le dio tiempo a nada más, ni a merendar, ni a hacer los deberes, a nada.
Al día siguiente hicieron el examen, al primer niño le salió muy bien y sacó muy buena nota, en cambio al segundo le costó más hacerlo ya que no se acordaba tanto.
Esta historia quiere decir que es mejor hacerlo tranquilamente y con tiempo que hacerlo deprisa y corriendo porque te pilla el toro.
-Me gusta tu consejo, lo pondré en práctica la próxima vez -Dijo Andrea.

A Laura Cobos le gustó también le gustó esto mucho y decidió añadirlo en su redacción, seguido de estos versos que ella realizó:

Para hacer bien un trabajo
mejor hacerlo con tiempo y con descanso.

Cuento de Octubre-El artesano




Había un hombre llamado Antonio, de treinta años, que vivía en una pequeña casucha en un pueblo de España, en el año 1320. Antonio vivía con su mujer y sus dos hijas.Era artesano y hacía cosas muy bonitas, pero en este tiempo no vendía mucho.
Un día, mientras Antonio estaba comiendo con su familia, vio que venían unos caballeros. Todos se asustaron un poco. Un caballero llamó a la puerta. Antonio abrió.
El caballero dijo:
-Buenos días, buen hombre ¿es usted Antonio González?
-Sí, el mismo ¿que quería?
-Me han comentado que es usted artesano y que se le da muy bien.
-Artesano soy, y lo hago lo mejor que puedo.
-Pues quería encargarle un tríptico de madera con motivo religioso ¿cree que podría hacerlo?
-Por supuesto.
-¿Cuándo tendré que venir a recogerlo?
-Venga dentro de tres semanas si no tiene ningún compromiso.
-No ninguno, dentro de tres semanas vendré a buscarlo.
Antonio acabó de comer y se puso a la tarea.
Después de dos semanas ya lo tenía casi terminado, le preguntó a sus hijas que, qué les parecía y ellas le respondieron que era la obra de mayor hermosura que había realizado.
Tres semanas después estaba acabado y apareció el caballero para recogerlo, el noble lo cogió sin mirarlo y le dio una gran bolsa de dinero por él.
Cuando el caballero llego al castillo y vio ese tríptico tan hermoso se asombró muchísimo y pensó que le había pagado muy poco, pero se dijo que no volvería a darle más. Al día siguiente todos los que vieron el tríptico dijeron que era hermosísimo con lo cual el noble decidió volver a la casa del artesano.
Llegó a la casa y Antonio abrió la puerta. El noble le dijo que era el mejor tríptico que había visto nunca y le dio el doble de dinero, también le pidió que se fuera a vivir al castillo. Antonio aceptó y desde entonces fue el artesano oficial del castillo.

lunes, 27 de septiembre de 2010

Mi Cuento ganador de 2º-octubre2009 EL HURACÁN

Había llovido durante toda la noche, pero la mañana parecía despejada. Eran las ocho de la mañana y estaba listo para ir al instituto. Era ya el 10 de junio y por eso me asombró que ayer hubiese llovido. Esos pensamientos me rondaban la mente… pero decidí no hacerles caso e irme tranquilamente al instituto. En el camino me encontré a Inés, mi mejor amiga, y me dijo:- Hola, Juan ¿qué tal?- Muy bien, ¿y tú?- Igual, a propósito, ¿no te pareció extraño el suceso de ayer?- Cuál, ¿el de que estuviera toda la noche lloviendo?- Sí, no recuerdo que haya llovido tanto en el mes de junio… ¿y a ti no te parece extraño?- Bueno… un poco, pero supongo que no habrá que exagerar ¿no?- Sí, supongo…Llegaron al instituto.- Bueno, adiós Inés, te veo en el recreo- AdiósEntré en clase y no podía dejar de pensar en ello… ¿Qué condición meteorológica podría causar eso? Llegó la hora del recreo y cuando íbamos a salir nos encontramos con que estaba lloviendo y hacía un viento horrible. Nos quedamos en el porche pero a medida que iba avanzando la hora del recreo el viento iba creciendo en intensidad. Los profesores nos dijeron que nos metiéramos en clase, que hacía mucho frío y un viento extremadamente fuerte. Yo pensaba y pensaba en qué podía ocurrir… y entonces miré a la ventana y me fijé en que los árboles se tambaleaban...Frío horrible, lluvias y vientos descomunales… y para colmo de repente se apagó la luz. La profesora se levantó, fue a encender la luz y nos dijo que había habido un apagón.En ese momento entró Inés en clase y le dijo a la profesora algo, pero lo dijo tan bajo que solo lo pudo oír ella, y entonces ella explicó: esta chica es un alumna del B y me ha dicho que acaba de subir el conserje y les ha dicho que estos cambios meteorológicos son debido a un huracán que se ha producido solo en nuestro barrio, misteriosamente.De repente me rondaron por la cabeza las imágenes del telediario en las que los huracanes, con su fuerza, se llevan los tejados de las casas…etc, y pensé lo que nos podía pasar… No quería ser pesimista pero no pude cambiar de pensamiento, y desee que no les ocurriera nada ni a mis padres ni a mis hermanas.Fue entonces cuando vi que un helicóptero aterrizaba en el patio, ¡¡venían a salvarnos!! La profesora nos ordenó que bajáramos ordenadamente al distribuidor del edificio. En el helicóptero no cabíamos todos y no fue hasta el tercero en el que me tocó subir. La nave nos llevó a una zona más segura y allí vinieron a buscarme mis padres con mis hermanas, pero, como nuestra casa estaba en zona de peligro fuimos a casa de mis abuelos.Estuvimos allí esa noche y otros dos días hasta que el huracán se convirtió en pequeños vientos.Volvimos a casa y al instituto y allí no se paraba de hablar de ello.Gracias a Dios acabó como una anécdota y no como un desastre.

lunes, 21 de junio de 2010

Cuento de junio


Eran las once de la mañana el día dieciséis de junio. Yo, tenía sesenta años y me encontraba en mi habitación, una habitación un poco pequeña pero muy agradable y con lo suficiente para poder hacer uso de ella. En esta tenía una mesilla de noche de madera, encima de la mesilla una lamparita para leer y un reloj de bolsillo que me regalo mi padre cuando era pequeño. En la habitación también había una cama de matrimonio puesto que había tenido una mujer, aunque ella me dejara por un hombre más alto y entretenido, pero eso no viene a cuento en esta historia.
El caso es que estaba allí cuando de repente sonó el teléfono, fui a cogerlo y era un hombre que me dijo que si quería ir al periódico esa tarde para hacerme una entrevista sobre lo que había pasado en la guerra. Yo respondí que si, y él me dijo que fuera a las seis a la calle Argenta número cinco.
Así pues a las cinco de la tarde ya estaba yo preparado delante de la puerta para que un taxi me llevara a la dirección que el hombre del teléfono me había dado.
Cuándo llegué allí un hombre me recibió y me llevó a una sala, nos sentamos en dos sillas que había y comenzó la entrevista:
-Se llama usted José María Gracia ¿verdad?
-Si así es.
-¿Podría usted decirme que edad tiene?, si no es molestia.
-Por supuesto que no es molestia. Tengo sesenta años.
-¿Y con qué edad tuvo que ir a la guerra?
-Fui con veinte años, para aquellos tiempos no demasiado joven.
¿Qué experiencia sacó usted de la guerra?
-Cualquier persona en su sano juicio te diría que de la guerra no se sacan experiencias y que fue horrible vivir aquello, pero yo era un chico joven y valiente que sacaba cosas buenas de todas partes y en la guerra hice amigos, no todos sobre vivieron, ni todos se quedaron aquí pero algunos sí y sigo manteniendo relación con ellos. Pero sin duda lo que más me sorprendió de la guerra es como pueden llegar a reaccionar las personas cuando se encuentran en una situación de pánico.
-Parece que no sufrió tanto en la guerra, y después de esta, ¿estudió y creó una familia?
-Hombre sufrir, sufrí, pero no tanto como otros y sí, después de la guerra estudié psicología para entender más la mente humana y no, no creé una familia, tuve una mujer, pero esta me dejó así que no se puede decir que haya tenido familia más que hasta los veinte años.
-¿Por qué razón aceptó hacer esta entrevista?
-La acepté porque como no tengo familia no le he contado a nadie mi experiencia y no me quería morir sin que nadie la escuchara
-Muchísimas gracias por venir y dedicarnos su tiempo.
-De nada ha sido todo un placer.
A los dos días compré el periódico y me encontré con mi entrevista con un comentario del periodista en el que decía que le asombraba mi valentía y mi capacidad para afrontar los problemas yo me sentí muy orgulloso y fui a contárselo a mis amigos.

jueves, 10 de junio de 2010

Cuento de mayo- El Anuncio


Una vez un chico de treinta años que trabajaba en una empresa de publicidad obtuvo un ascenso y por ello debía tener una idea para un anuncio de cerveza, el chico estaba muy feliz con su puesto así que empezó a pensar. Estuvo un fin de semana pensando sin obtener ninguna idea hasta que el lunes por la mañana, yendo hacia la oficina, vio a un vagabundo pidiendo, pero a él le pareció mas bien como si estuviese adorando al vaso en el que algunas personas le dejaban dinero. Al chico le vino la inspiración el anuncio sería así: Un vagabundo un perro y un gato en posición como si adoraran al vaso, este vaso sería de cerveza y el anuncio querría decir que hasta los gatos y los perros adoran esta cerveza. Pensando esto el chico le pidió al vagabundo que fuese con él. El vagabundo aceptó.
Llegaron a la oficina y el chico le explicó la idea a su jefe. A su superior le pareció una magnífica idea y entonces empezaron a trabajar.
Consiguieron un gato y un perro adiestrados, fueron al estudio y empezaron a grabar. El anuncio quedó estupendo y en cuanto salió en la televisión subieron mucho las ventas de esta cerveza y el dueño de la marca fue específicamente a darle la enhorabuena.
Al ver esto muchas empresas acudieron allí para hacer sus anuncios y el chico siguió creando.
Después de un año él era muy importante para la compañía y vivía feliz en una casa con su mujer.
Pasó el tiempo y el hombre ya tenía dos hijas mayores a las que había enseñado todo lo que sabía sobre publicidad. Las dos se dedicaron a hacer anuncios. El padre se jubiló y vivió el resto de su vida feliz y orgulloso de sus hijas.

cuento de abril- Chailin


Hace veinte años en un pueblo perdido de china conocí a una niña, una niña de diez años delgada y hermosa. Cuando la vi, me pareció un fantasma estaba sentada en el suelo debajo de una mesa, pero me acerqué a ella y con el chino que sabía le pregunté que como se llamaba, me dijo que Chailin, al darme cuenta de que estaba sola le pregunté:

-¿Qué haces aquí tan sola?¿Dónde están tus padres?

Ella susurrando y con miedo dijo:

-Me han abandonado.Me dejaron aquí y se fueron a casa.

Yo, no sabía que hacer, pero cogí a la niña y me la lleve a casa. Luego me dí cuenta de que tenía que ir a la policía, se lo dije a Chailin y fuimos. La policía dijo que lo iban a investigar pero que mientras si me podía quedarme con la niña. Yo acepté.
Cuando volvimos empecé a charlar con Chailin. Le estuve haciendo preguntas y en resumen me contó que en su casa la maltrataban, que desde muy pequeña había tenido que trabajar. En casa tenía que limpiar y hacer la comida. También le hacían tejer ropa para sus hermanos y, fuera de casa, tenía que trabajar en la tienda de sus padres. Chailin dijo que lo hacía todo lo mejor que podía y que no entendía por qué sus padres le habían abandonado. Entonces yo le dije que yo no le haría trabajar, que conmigo sería una chica como las demás, que iría al colegio, que haría amigas y que iría con ellas a jugar. A Chailin se le iluminó una sonrisa en la cara. Ella siempre había deseado ser así. En el fondo no le gustaba trabajar tanto.
Así fue, la niña fue al colegio e hizo muchos amigos y un día llego una carta de la policía a casa. Esta decía que sus padres se habían mudado. No les encontraban por ninguna parte y, que si me quería quedar con Chailin, tendría que adoptarla, y que si no se la llevarían a un orfanato de mala muerte. Decidí adoptarla, pasamos lo diez años más bonitos de nuestras vidas.
Pero cuando Chailin iba a cumplir sus 21 años días antes aparecieron sus padres en la puerta de casa. Decían que lo sentían mucho por haberla abandonado, pero que se arrepentían y querían volver a vivir juntos. Chailin se lo pensó mucho, pero decidió que no quería volver con ellos, no quería arriesgarse.
Ya han pasado veinte años desde que la conocí y aquí seguimos, Chailin vive con su marido y con sus dos hijos en una gran casa, pero ella siempre viene los fines de semana a decirme lo mucho que me quiere y aprecia.

sábado, 24 de abril de 2010

Cuento de Marzo - Carlos y el caballo

Hace cincuenta años había un hombre muy rico llamado Carlos. Tenía una casa lujosa en mitad del campo, era su casa de verano.
Un día fue al pueblo y le ofrecieron un caballo. Un caballo negro, hermoso, fuerte y con mucho
temperamento. El hombre sin pensarlo mucho lo compró. Se lo llevó a su casa, le puso una silla lo empezó a montar.Cabalgo por una inmensa llanura y volvió a casa.
Era el mejor caballo en el que él había montado, le gustaba tanto que lo montaba todos los días. Cuando montaba en él, era como un solo ser vivo ya que se
compenetraban estupendamente y como lo hacían tan bien, se apuntó a muchas carreras. Muchas de ellas las ganó y se hizo popular entre el público.
Pero un día estaba montando y Carlos se cayó, sufrió un gran golpe y se quedó invalido. No podría hacer la cosa que más le gustaba en el mundo: montar a caballo.
Cuando el animal se
dio cuenta de que su amo ya no lo montaba, se deprimió y dejó de comer.
La noticia de Carlos salió en los periódicos y un joven inventor llamado
Andy, creó una silla especial para que Carlos pudiera montar sin caerse, pro el invento fracasó. No era igual que antes, era como cabalgar en un caballo de mentira, de los que hay en los recreativos de los centros comerciales.
Carlos pensó que vivir inválido sin poder montar, no era vivir y un día a las siete de la tarde cogió una pistola que tenía en su casa se suicidó.
El caballo, que que siguió sin ser ensillado, no comía nada y un día se dejó caer en el establo y murió.
Cuando el suceso salió en los periódicos no decía nada de cómo murieron y esta historia siempre será un secreto para el mundo.

Cuento de Febrero - Empresaria



Erase una vez una empresaria llamada Julia, era una mujer alta, guapa, pero no era feliz.
Esta mujer era muy ambiciosa, y siempre lograba sus propósitos y por tanto ganaba mucho dinero. Pero a la vez que lo ganaba se lo iba gastando en ropa de lujo y aparatos electrónicos.
Un día la mujer dejo de tener ideas para su trabajo y ganaba cada vez menos, pro tenia la costumbre de gastar mucho dinero y poco a poco acabó quedándose sin nada.
Un día su jefe le dijo que habían encontrado a un candidato más preparado para su puesto y a ella la despidieron.
La chica intentó ganarse la vida como pudo, pero solo encontró un puesto en un mercadillo.
La mujer compraba bragas a buen precio y las vendía. Su puesto tenía miles de bragas de todos los tamaños y colores y había un cartel que decía: "Por la compra de tres bragas regalamos un libro". Eran libros de su casa que ella ya había leído.
En ese mercadillo se dio cuenta de el interior de las personas, de lo que era en verdad la felicidad, de que no importa la ropa que lleves, ni si eres alta o baja sino de cómo eres con los demás y lo que pienses.
La mujer se hizo amiga de las personas de los otros puestos y después de unos meses se hicieron todos una gran familia. Y cuando cerraban los puestos se iban todos juntos a jugar a las cartas o a tomarse un café.

jueves, 11 de febrero de 2010

Cuento de Enero


Érase una vez un niño de nueve años que vivía en Francia en un orfanato ya que era huerfano.
El niño estaba triste por la muerte de sus padres y en el orfanato no tenía amigos.Era un niño muy independiente hasta que cumplió los trece años.
Ese día llegó una nueva huérfana que tenía su misma edad, ella se llamaba Clara.
Cuando la vió, le recordó a su infancia cuando el llegó al orfanato. A él no le había gustado estar solo en aquellos fúnebres momentos, así que se acercó a ella y le preguntó:
- Hola, ¿cómo te llamas?
La chica tardo en contestar, pero finalmente dijo:
- Clara, ¿y tu?
- Yo, Javi
- Hola, Javi
- ¿Qué tal?
- Bueno, aquí tirando...
- Te entiendo...
Pasaron tres meses y estos dos chicos se hicieron super amigos, tanto es así que Javi se enamoró de Clara y cada noche cuando se iba a dormir escribía cosas bellísimas sobre ella. Hizo muchísimas poesías diciendo lo guapa que era.
Pero, desafortunadamente, un día el camión que traía la comida la atropelló.La chica quedó inconsciente en el suelo, la llevaron al hospital en ambulancia y los médicos dijeron que estaba en un coma muy profundo y que sería muy difícil que despertara.
Cuando Javi se enteró, se puso a llorar y corrió a su habitación a encerrarse, y allí, pensando, se dió cuenta de que Clara era la única amistad que tenía en el mundo y que si moría, él moriría también con ella.
Con mucho miedo empezó a quemar todos los poemas y escritos que había hecho sobre ella para no pensar en que esa creación de Dios tan maravillosa podría desaparecer de un momento a otro.
En ese momento, la figura de Clara apareció por la puerta, Javi se quedó atónito y tiró el papel que estaba quemando al suelo, lo pisó y corrió a abrazar a Clara, depués de una corta espera dijo:
- ¡Qué alegría! No sé que hubiera hecho si te hubiera perdido
- Yo tampoco, y ¿qué quemabas cuando entré?
- Esta bien te lo contaré... Hace un tiempo me di cuenta que eres la chica más hermosa del planeta y que te quiero, por tanto cada noche me acuesto escribiendo lo que siento por ti, cuando me enteré de que te podía perder, para no pensar en ello me puse a quemar todos esos escritos.
- ¡Qué tonto!...pero te queda uno ahí, ¿lo puedo leer?
- Por supuesto.
La chica al leerlo se quedó tan impresionada que de su boca no salieron mas que dos palabras, y esas palabras fueron...TE AMO.